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NUEVOS VIEJOS TIEMPOS

Actualizado: 25 ene 2021

Por: Juan Daniel Correa Salazar

@juandanielcorrea

@musica_creativa_de_colombia

16 de Abril de 2020


Charles Baudelaire lo describe así en su Pintor de la vida moderna (1863):

La modernidad es lo transitorio, lo fugitivo, lo contingente, la mitad del arte, cuya otra mitad es lo eterno y lo inmutable

Vivimos días sorprendentes. El piso se está moviendo. Lo que creímos inalterable se transfigura. Son tiempos de cambio.

Hace menos de dos años escribí para www.energialimpia.co: Cambia, texto muy musical, por cierto. En ese entonces, la idea, provocado entre otros por Soda Stereo (cómo pueden ver pilar eterno e inmutable en esta columna) era inspirar a los lectores a “tomar la ruta”. Arriesgarse. Lanzarse al agua. Pensar diferente. PULZO, medio que también me publicaba, le puso a la nota: No le temas al cambio.

Hoy no es un asunto de temor; es un imperativo. Para sobrevivir, debemos cambiar. Se nos acabaron los conciertos por una buena temporada. Hay que ver qué nos inventamos para seguir adelante.

Por ahora no está mal deleitarnos con obras grandiosas de la humanidad que han quedado registradas para siempre. La siguiente con un pleno tono de modernidad contingente, fugitiva y transitoria:


¡Qué maravilla la música en vivo! El recital del maestro Bowie tuvo lugar en París en 2002. ¿Y el mensaje? Asombroso al menos. Desde 1971 cuando grabó la canción hasta hoy – y de aquí en adelante – incita a ponernos en movimiento, a transformarnos:


Ch-ch-ch-ch-changes…

Turn and face the strange

Antes era algo voluntario; en este instante la respuesta al llamado se hace imperiosa. Es una época extraña; hay que mirarla de frente. En esta composición, y en el video, vive más que nunca la palabra del maldito Baudelaire. Bendito seas, poeta.

Si es hora de cambiar, sería propicio saber ¿Para dónde vamos? Clave para hacerlo es comprender ¿De dónde venimos?:


ChocQuibTown lo tiene claro. No conozco ninguna crónica, artículo o representación histórica que describa mejor lo que es Quibdó – y, por extensión, el deslumbrante Pacífico Colombiano – que esta tonada. Otra más, imperturbable e inmortal. Un clásico.

Con ello en mente, es un inmejorable momento para preguntarnos:


¿Quiénes somos?

Denle "Play" a la Playlist del Gomelo Champetuo:



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